5 de enero de 2014


para andar...


...que tus pies sean bendecidos para andar por preciados caminos,
que tus manos sean suaves para tejer almas y fuertes para enmendar tus desvíos
que tu mente sepa dudar, de todo aquello que te has convencido

y que tu corazón se aferre a sus certezas, y asi sepa distinguir entre lo que debe o no ser elegido.